Necesidad de anticipación y conservación de infraestructuras


En la Conservación y Explotación de Infraestructuras (de cualquier tipo, pero especialmente en carreteras), una de las mayores preocupaciones de los gestores es la reducción de costes. En muchas ocasiones, debido a políticas no sostenibles, se prefiere crear una nueva infraestructura en lugar de mantener las actuales. Las actuales ya están construidas y por tanto no salen en portadas de periódicos, y es por eso que muchas veces se olvida que es mucho más barato mantener las infraestructuras que ya se tienen que crear una nueva (que en muchos casos no generan sino más problemas).

Es decir, se debe reforzar la idea de que el mantenimiento y la conservación de las infraestructuras son necesarios. Como dice el refrán, quien no arregla gotera hace la casa entera… Llegados a este punto, es necesario disponer de mecanismos de priorización de los recursos, herramientas de gestión que nos permitan maximizar las acciones de mantenimiento requeridas reduciendo el coste.

Estas herramientas deben ofrecer indicadores obtenidos a partir de datos (por ejemplo, datos de cumplimiento de tareas de conservación, de inspecciones de las infraestructuras y sus elementos, datos obtenidos de forma periódica de sensores, etcétera). Estos informes de indicadores deben servir a los gestores a tomar decisiones de la forma más acertada posible, e incluso anticiparse para realizar acciones que dentro de un tiempo aumentarán su coste de manera exponencial.

La gran cantidad de información que muestran estos sistemas (como SmartRoads de ITERNOVA) hacen que sea de una gran utilidad, siempre y cuando se utilicen de forma regular. De nada sirve disponer de un sistema muy potente si no se alimenta con datos de forma periódica. Haciendo un símil, es como tener un Fórmula 1 y utilizar gasolina con mezcla para motocicletas. La adquisición de estos datos se debe hacer de forma continuada (por ejemplo, introducir datos de accidentes conforme ocurren, o registrar tareas de conservación ordinaria o de agenda de vialidad conforme ocurran), y ello implica ser metódicos. Asimismo, si se disponen de elementos que envíen datos de forma continuada (por ejemplo, dispositivos de gestión de flotas GPS para vialidad invernal) se deben realizar las correspondientes instalaciones, configuraciones y mantenimiento con tiempo, ya que si no la época invernal se echa encima y no se tiene tiempo para dar respuesta a las necesidades requeridas.

Como ya se ha comentado, el disponer de esta información actualizada permitirá a los gestores anticiparse. Por ejemplo, pueden saber qué tramos serán considerados de concentración de accidentes en tiempo real, pudiendo actuar antes de que sean catalogados de forma oficial como tales. Igualmente obliga a mantener el inventario de la carretera actualizado y en correcto estado, sin deterioros, evitando casos como los de accidentes mortales debido a salidas de vía en tramos en donde tendría que haber barrera de seguridad y por no disponer de un sistema de gestión de la conservación no se reinstalaron tras accidentes previos en el plazo de tiempo estipulado.

El disponer de herramientas que nos obliguen a llevar seguimiento de actividades y realizar acciones de conservación siguiendo los protocolos marcados hará que los costes se reduzcan, al poder ser más eficientes en dichas tareas de conservación y llevar un verdadero control y priorización de tareas de mantenimiento. Hay que tener en cuenta que muchas de estas herramientas permiten hacer un seguimiento completo de todos los aspectos de gestión, por lo que el coste es, a su vez, menor que si se requieren varios sistemas independientes para gestionar diferentes aspectos (por ejemplo, seguridad vial, rehabilitación, vialidad o conservación ordinaria).

Como conclusión: Cualquier infraestructura debe conservarse de forma correcta para reducir costes, y para ello necesitamos gestionar gran cantidad de información. Esto nos permitirá anticiparnos, reducir costes y mejorar el nivel de calidad de nuestras infraestructuras. No hay que olvidarse que en España disponemos de grandes infraestructuras, de las más avanzadas del mundo, que debemos mantener, y mantener a este nivel.