Autor: César Hinojosa

Qué son y para qué sirven las estaciones de aforo


Las estaciones de aforo son unos dispositivos que se implantan en las carreteras con el objetivo de contabilizar el número de vehículos que pasan por el punto concreto en que se encuentran, permitiendo diferenciar el tipo de vehículo (vehículos pesados o vehículos ligeros), o la velocidad media de paso de los mismos.

Esta información suministrada permite a los responsables de las carreteras planificar las inversiones y mejoras a realizar en las diferentes carreteras, en función del tráfico soportado (información obtenida de las estaciones de aforo), junto con otros aspectos que son tenidos en cuenta (factores medioambientales, necesidades particulares de cada zona y presupuesto con el que se cuenta).

Las estaciones de aforo implantadas en la actualidad, ofrecen la posibilidad de enviar los datos de manera automática (vía GSM o GPRS) a algún centro de control, lo que permite conocer en todo momento el tráfico existente en las diferentes zonas donde están instaladas. Un análisis estadístico de este tráfico posibilita la planificación eficiente de las obras en las carreteras en los momentos de menor tráfico, así como una planificación y mejor atención de las posibles emergencias. De la misma manera, la información suministrada relativa al tipo de vehículos que pasan por una carretera correspondiente (fundamentalmente cuando el tipo de vehículo más habitual es de los considerados «pesados»), permite establecer prioridades en la modificación de los trazados, para cubrir las necesidades existentes.

Los modelos más habituales de estaciones de aforo implantadas en la actualidad se basan en un pareja de espiras electromagnéticas instaladas en cada carril de la calzada, que detectan el paso y la presencia del vehículo, calculando una serie de datos de interés (peso, longitud, velocidad o calzada), que posteriormente serán enviados a un centro o sistema de control, para la visualización gráfica y el tratamiento de toda esta información.
Estas estaciones tienen un bajo consumo de energía, aunque se recomienda su conexión a la red eléctrica frente a otras alternativas (alimentación a través de un panel solar, por ejemplo), para asegurar su correcto funcionamiento en todo momento.

 

Meteosafety, un uso inteligente de la información meteorológica

El proyecto Meteosafety pretende mejorar la seguridad vial en nuestras carreteras, haciendo un uso inteligente de la información recibida por parte de los sistemas meteorológicos existentes (estaciones meteorológicas y servicios públicos).

Este proyecto, liderado por el Institut de Robótica i Tecnologies de la Informació i la Comunicació (IRTIC) de la Universidad de Valencia (UV), y financiado con más de 500.000 € por parte del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX), ha sido desarrollado durante estos últimos años (se inicia en el 2008, y la creación del prototipo finaliza a finales del 2010), y se encuentra en estos momentos en fase de implantación en un entorno real.

Meteosafety cuenta con dos líneas principales de actuación:
    1.- Actualización dinámica de los paneles informativos de las carreteras, con la información meteorológica prevista (en el caso de que sea adversa), obtenida fruto del análisis de los diferentes sistemas meteorológicos existentes en la zona (estaciones y servicios públicos), cuyos datos son tratados por el Sistema Experto Meteosafety para ofrecer estas predicciones.
    2.- Análisis de las acciones a tomar para reducir las consecuencias de los fenómenos meteorológicos adversos, y envío automático al Centro de Gestión de Tráfico, o a la Demarcación de Carreteras correspondiente.

Junto con estas líneas de acción, se pretende aprovechar el conocimiento adquirido para asesorar a los organismos responsables de carreteras, las mejores zonas de colocación de los sistemas meteorológicos (en función de su nivel de criticidad ante problemas atmosféricos), y analizar la influencia de los factores meteorológicos (unidos al tráfico y tipos de vías) sobre la accidentalidad de las mismas, para ofrecer soluciones.

Para facilitar la implantación del sistema en el entorno real, se han basado todos los trabajos en el uso de estándares, tecnologías y equipamientos ya existentes en el mercado, como el estándar de las ERUs (Estación Remota Universal), y la difusión de mensajes de alerta infraestructura vehículo RDS-TMC (canal de mensajes de tráfico).

La integración de estos sistemas expertos en los sistemas de gestión integral de carreteras existentes, donde los responsables no sólo tengan la información tratada de los datos meteorológicos sino otros aspectos de interés (estado del tráfico, cámaras de explotación, información actualizada de los elementos que componen la carretera (firme, pavimiento, señales, etcétera), rutas más utilizadas, etcétera), van a suponer sin duda un gran avance para la seguridad de los conductores, y para la gestión eficaz del tráfico y de las carreteras por parte de los responsables de las mismas. [Continuar leyendo]